La definición de una landing page es una página web, distinta de la home, diseñada específicamente con el único objetivo de convertir, o bien en leads (usuarios que han rellenado un formulario) o bien en ventas, las respuestas a una promoción.

 

Por lo tanto ya tenemos una de las premisas de las landing pages; se usan para dar apoyo a campañas de adwords y/o promociones.

 

En estas páginas de aterrizaje hemos de reducir al máximo las secciones de la web que no tengan una relación directa con el objetivo de la landing page, que es la conversión de las respuestas a nuestras campañas.

 

Es por esto que el diseño de una landing sólo debe atender al objetivo de conversión que tengamos: el registro, la venta o un nuevo clic. Además también tenemos que guardar una concordancia visual entre la imagen corporativa aportada en el anuncio, la imagen de la web oficial y la de nuestra landing page, ya que esto aportará credibilidad y confianza.

 

Entre los atributos que ha de tener una buena landing page podemos destacar: 

 

- Sencillez, eliminando todo aquello que sea accesorio.

- No debemos pedir demasiada información, recordemos que se trata de una primera toma de contacto.

- Facilitar el auto rellenado de los formularios o conectar mediante Facebook u otra red social.

- Trabaja en la usabilidad de tu página, haciéndola sencilla y clara.

- Aporta datos u enlaces a vídeos o documentos que refuercen tu propuesta de valor.

- Optimización para móviles, no olvides adaptar tu landing page al formato móvil ya que hoy en día se producen gran número de accesos a través de este terminal.

- Continuidad. La acción del usuario debe desencadenar una cadena de acciones la primera de ellas debe ser una pagina de post-conversión que agradezca al usuario su acción y le indique de nuevos pasos. A partir de aquí se desencadenarán otras: la descarga de un pdf, una llamada de un asesor, viralidad o registro en redes sociales. Habitualmente estas acciones deben ser lo más inmediatas posibles o el prospecto se enfriará. 

 

Con todo ello afianzaremos los eslabones de la cadena en la que se basa cualquier negocio online: 

 

Conseguir visitas - Convertirlas en clientes - Retener esos clientes